Yasashisa Sampiterno
Yasashisa Sampiterno
La Enfermería es una profesión esencial y una disciplina de las ciencias de la salud que se centra en el cuidado integral de las personas, las familias y las comunidades.
Su objetivo principal es ayudar a los individuos, ya sean sanos o enfermos, a alcanzar y mantener el mejor estado de salud posible, o a lograr una muerte digna.
Adultos
Enfoque de la enfermería de adultos
La enfermería de adultos va más allá de tratar enfermedades, ya que también se centra en la promoción de la salud, la prevención de padecimientos y la educación del paciente. Esto incluye:
Cuidados preventivos: Ofrecer orientación sobre hábitos saludables, como una buena nutrición, la práctica de ejercicio y la gestión del estrés, para evitar enfermedades crónicas como la diabetes, la hipertensión o problemas cardíacos.
Gestión de enfermedades crónicas: Ayudar a los pacientes a manejar condiciones a largo plazo, enseñándoles a controlar sus síntomas, administrar medicamentos correctamente y realizar cambios en su estilo de vida.
Cuidados agudos: Proporcionar atención de enfermería en hospitales o clínicas durante una enfermedad o lesión repentina. Esto puede incluir el monitoreo de signos vitales, la administración de tratamientos y la recuperación posoperatoria.
Atención integral: Considerar al paciente como un todo, evaluando no solo sus necesidades físicas, sino también su bienestar emocional, social y espiritual para ofrecer un cuidado completo y humanizado.
Rol de la enfermera en el cuidado del adulto
El rol de la enfermera de adultos es multifacético. No solo se encarga de las tareas directas de atención, sino que también actúa como defensora del paciente, educadora y líder en el equipo de salud. Algunas de sus funciones clave son:
Evaluación de la salud: Realizar una valoración completa del paciente, incluyendo su historial médico, estado físico y mental, para identificar sus necesidades de cuidado.
Planificación del cuidado: Desarrollar un plan de atención personalizado, estableciendo objetivos claros y acciones específicas para ayudar al paciente a mejorar su salud.
Administración de tratamientos: Aplicar inyecciones, curar heridas, manejar equipos médicos y administrar medicamentos de forma segura y precisa.
Coordinación de la atención: Trabajar en colaboración con médicos, terapeutas y otros profesionales para asegurar que el paciente reciba la mejor atención posible.
´Pediátricos
Diferencias clave con la enfermería de adultos
La enfermería pediátrica no es solo una versión a menor escala de la enfermería de adultos; presenta diferencias únicas debido a las características especiales de los niños:
Desarrollo constante: Los niños están en constante crecimiento y desarrollo. La enfermera debe entender estas etapas para evaluar su salud, aplicar tratamientos y educar a los padres.
Comunicación: Los niños, especialmente los más pequeños, no siempre pueden expresar sus síntomas o miedos. La enfermera pediátrica usa habilidades de comunicación adaptadas, como el juego terapéutico y un lenguaje sencillo, para ganar su confianza y obtener información.
Involucramiento familiar: A diferencia de los adultos, los niños casi siempre están acompañados por sus padres o tutores. La enfermera pediátrica trabaja en estrecha colaboración con la familia, educándolos sobre el cuidado del niño y brindándoles apoyo emocional.
Necesidades emocionales: Los niños pueden sentir miedo o ansiedad en el hospital. La enfermera se convierte en una figura de apoyo, usando distracciones y un ambiente amigable para reducir el estrés.
Rol de la enfermera pediátrica
El rol de la enfermera pediátrica es fundamental en diversos entornos, desde hospitales hasta clínicas y escuelas. Sus principales responsabilidades incluyen:
Evaluación de la salud: Realizar valoraciones de salud específicas para la edad, como el seguimiento del crecimiento, la nutrición y las habilidades motoras.
Administración de tratamientos: Proporcionar medicamentos y tratamientos adaptados al tamaño y peso del niño, garantizando la dosis y vía de administración correctas.
Vacunación: Administrar vacunas según los calendarios de inmunización para prevenir enfermedades infecciosas.
Educación sanitaria: Enseñar a los padres sobre temas como la lactancia, la nutrición adecuada, la seguridad en el hogar y el manejo de enfermedades comunes.
Defensa del paciente: Actuar como defensora de los derechos y necesidades del niño, asegurando que se tome en cuenta su bienestar en todas las decisiones médicas.